“Estaba muerto, ahora está rematado”, me dijo un ejecutivo tratando de armar un refrán inexistente cuando le pregunté sobre el mercado laboral. El mercado laboral argentino viene sufriendo los vaivenes de la economía y la política y no logra encontrar un piso de estabilidad. El 50% de los ocupados son asalariados formales (38% de este total corresponde al empleo público); 25% son asalariados en negro, y 25%, cuentapropistas (dos tercios en negro). Es decir, la foto del mercado laboral ya era endeble antes del coronavirus, con un alto grado de informalidad. Hoy, el mercado laboral está en terapia intensiva. En este contexto, ¿qué sucede con las búsquedas ejecutivas? ¿Qué nos depara el futuro?

El mercado de búsquedas ejecutivas en el subsuelo: según Matías Ghidini, general manager de Ghidini Rodil, el escenario previo al coronavirus ya era malo: “Cabe recordar que 2019 resultó el peor año para el empleo de los últimos 13 con una tasa pico de desocupación del 10,6%. Poco y nada había cambiado en los cuatro o cinco meses de gobierno de Alberto Fernández hasta el golpe de knock out que fue la crisis del Covid-19, en marzo. Desde entonces y hasta hoy, la demanda de posiciones ejecutivas cayó entre un 60%y 70%, estabilizándose en este subsuelo en las últimas semanas”.

Las búsquedas ejecutivas habían tenido un repunte previo a las elecciones PASO en agosto de 2019 y luego del sorpresivo resultado en ellas las búsquedas laborales entraron en un modo errático dependiendo de las diferentes industrias. El acceso al poder de Alberto Fernández no cambió esta circunstancia, debido a que las empresas quisieron saber, antes de expandir la nómina o generar cambios en la estructura, cuál iba a ser el plan económico del nuevo gobierno y qué pasaría con la deuda externa. Así se encontraba el mercado de búsquedas ejecutivas hasta la aparición de la pandemia del coronavirus.

Industrias demandantes y resucitadas: “Las industrias que venían con proceso abiertos en las cuales el impacto del covid-19 fue menor decidieron continuarlos, como por ejemplo agro y tecnología, y aquellas industrias que continúan funcionando porque son esenciales, tales como consumo masivo, retail o salud, han abierto nuevos proce sos”, menciona Ana Renedo, de MR Partners. Daniel Iriarte, associate director de Glue Executive Search, considera: “Hay sectores dinámicos donde se generan oportunidades: todo lo relacionado con lo online, las fintech donde muchas compañías más tradicionales y aseguradoras se dan cuenta a la fuerza de lo lejos que a veces están de lo digital versus la competencia que tiene estrategias digitales más desarrolladas. El coronavirus dejó a muchas compañías expuestas y eso hace que haya muchas posiciones vinculadas con lo digital y el e-commerce moviéndose bastante rápido. En el sector farmacéutico y salud también vemos movimiento. Trabajamos bastante con la industria farmacéutica y vemos que se sigue moviendo, y entraron nuevas posiciones. Las clínicas también están demandando personal”.

Para Andrea Sacerdote, socia fundadora de Talenters, el shock del coronavirus golpea a todos por igual, incluyendo las tecnológicas y startups: “Hay compañías de tecnología pura y/o proyectos en estadio de startup que estaban creciendo de manera muy acelerada tomando gente y posiciones estratégicas también que pusieron freno de mano a ese acelerador claramente”. Pero según ella también genera oportunidades: “Otros sectores siguen apostando al crecimiento tomando esto como una oportunidad, como las fintech , e industrias con mayor retraso en su nivel de digitalización están empezando a planificar nuevas búsquedas para hacer frente a la nueva realidad que se viene. El consumo masivo es un ejemplo”.

En general, los headhunters coinciden en que, si bien la crisis trajo aparejada una caída entre 40 y 70% de las búsquedas, dependiendo de qué industria se hable, también generó oportunidades en algunos sectores. En el consumo masivo, la crisis trajo aire fresco a un sector que hace años viene en crisis y de ser un rubro que expulsaba gente del mercado laboral hoy están de vuelta tomando todo tipo de personal. Esto se ve fundamentalmente en los supermercados y las empresas de alimentos. También se ven movimientos en sectores relacionados con la salud, como servicios y equipamientos médicos, comercialización, e-commerce , procesamiento de alimentos, logística, higiene y cuidado personal.

Los desafíos y el futuro: “Presenta un desafío llevar adelante un proceso 100% virtual. A nosotros no nos cambió tanto porque teníamos un sistema en la nube, Zoom etc., pero es un desafío para la empresa llevar una entrevista virtual. Lo que en EE.UU. y Europa es común acá todavía cuesta. La situación hace que muchas más compañías estén probando y que se den cuenta de que es posible”, puntualiza Iriarte, de Glue. Para Ana Renedo, el cambio también es desafiante para las empresas “los procesos son virtuales, sin entrevistas presenciales, y el proceso de ingreso y onboarding también es virtual, lo cual es todo un aprendizaje para los candidatos y las empresas. Esta modalidad es común en la industria de la tecnología, sobre todo en empresas muy globalizadas, pero no en el resto de las industrias”.

El futuro se presenta incierto para las búsquedas ejecutivas. Sin embargo, de algo están seguros en el sector: este es un cambio que vino para quedarse y generará un movimiento donde habrá ganadores y perdedores.

Para Andrea Sacerdote, de Talenters, hay ciertas necesidades de determinados tipos de roles que más allá del contexto país que se van a seguir necesitando para hacer frente al nuevo escenario: “Los roles de UX, analytics, tecnología ingeniería, producto, y operaciones para e-commerce supply chain son necesarios. Este tipo de roles está muy demandados en niveles directivos y más junior también”.

Para Ghidini, “esta crisis aceleró el ritmo de algunos cambios que ya se venían: la comercialización online (marketing, venta y pago), nuevas formas de logística (liviana) y avances tecnológicos. Y de este rumbo no se va a volver al mismo lugar. Por ende creo que los roles vinculados a transacciones y tareas físicas tenderán a caer, y aumentarán los perfiles de logística, IT o marketing digital”.

Iriarte considera que el foco posterior a la crisis será una transformación de las empresas: “Esta crisis las dejó en evidencia a muchas y puede ser un acelerador. Van a venir muchos perfiles nuevos, como CTO, c ustomer experience , digital marketing, data analytics. Mueren marketing tradicional, lo operativo, transaccional, atención al cliente, salvo excepciones”. El coronavirus vino para quedarse en el mercado laboral.

Fuente: lanacion.com.ar