En enero de 2014, comScore reveló que 183,8 millones de estadounidenses vieron 48,7 mil millones de videos online y 11,3 mil millones vieron anuncios en video online. Dado el potencial alcance e impacto, tanto de los videos como de los anuncios en video, estos se están convirtiendo rápidamente en componentes clave de la estrategia omnicanal de los marketineros. Los videos pueden transmitir una impresión duradera sobre los productos y servicios, así como atraer consumidores, construir credibilidad y generar ingresos. Pero, cómo se ejecuta la campaña de video es lo que marca la diferencia entre el éxito y el fracaso. Crear videos de alta calidad e incluirlos en la campaña omnicanal, no es tarea fácil, pero cuando se hace bien, resulta muy eficaz. ¿Qué hay que tener en cuenta para que la campaña resulte exitosa? Aquí algunos datos interesantes.
El contenido del video debe ser persuasivo
Los videos más persuasivos de e-commerce son, usualmente, clips breves, informativos, que resaltan, de manera sutil pero efectiva, los beneficios del producto o servicio, guiando suavemente al consumidor a tomar la decisión “correcta”. Es importante incluir en el video testimonios de clientes, análisis del producto, demostraciones y otros contenidos que demuestren la experiencia de la empresa.
También hay que determinar si se usarán videos propios o algunos creados por proveedores. Está demostrado que los videos producidos profesionalmente, optimizados para el e-commerce, tienen mejor aceptación. Independientemente del enfoque, tener una narrativa sólida es esencial. Esto puede darle vida al contenido y comprometer al espectador, de una forma que otros materiales de marketing no pueden.
El SEO y la distribución tienen un rol clave
Con YouTube ubicándose como el segundo buscador de videos más importante, los resultados actuales de búsquedas combinadas requieren un enfoque audaz en SEO. Estar en la primer página de una búsqueda en Google, puede ser la diferencia entre alguien que encuentre su empresa o a su competidor. Los componentes correctos para aparecer en la mayor cantidad de búsquedas posibles cuando se sube un video, implican tener la presentación adecuada de los sitemaps del video, añadirle los metadatos correctos, descripciones y contenido.
También ayuda pensar más allá, y no subir los videos solamente en el sitio web propio, sino distribuir el contenido en sitios como YouTube y Facebook. Los usuarios suelen acudir a YouTube para buscar contenido o videos instructivos. Poniendo toda esta información, es una manera de asegurarse que los videos aparezcan lo más arriba posible en la lista de resultados de las búsquedas.
Además, hay que tener en cuenta el canal móvil para realizar las campañas y para su distribución. Con 6.000 millones de suscripciones de telefonía móvil en todo el mundo en 2013, no se puede ignorar el canal móvil. Una estrategia de “video en todas partes” es alcanzable y permite atraer consumidores a través de múltiples plataformas. Por ejemplo, considerar la integración de videos en los sitios de compras y aplicaciones móviles usando un soporte integrado de video HTML5, puede ser útil. También se pueden crear códigos QR únicos para cada video, para que cuando se escanea el código, se reproduzca una versión móvil del video en diversos dispositivos, incluyendo iPhone, Android y BlackBerry.
Las pruebas A/B determinan el mejor plan de acción
Dejar el video marketing al azar, es muy arriesgado, especialmente si se tiene en cuenta el tiempo y esfuerzo puestos en ello. Con las pruebas A/B automatizadas, se puede determinar mejor las estrategias que están generando la mayor cantidad de resultados y cómo el programa precisa ser ajustado. Por ejemplo, se puede establecer qué video banners, capturas y otros call to action se están reproduciendo más. Las pruebas A/B también pueden mostrar si una captura tiene más tráfico que otra (por ejemplo, un video con una persona que mira directamente a cámara frente a uno con productos). Esto, a su vez, puede ayudar con la estrategia global de video y, como consecuencia, aumentar el tráfico y el compromiso de los clientes.
La analítica ayuda a determinar el impacto
Para justificar la inversión en video marketing, es necesario tomar en cuenta la analítica. Los análisis adecuados de video, pueden ayudar a medir su efecto en el compromiso y la actividad del sitio y lo más importante, ayudar a ver cómo los ingresos y la conversión son modificados por el video. Métricas como dólares por video, ingresos por juegos y la tasa de conversión de video pueden revelar al instante qué videos tienen más éxito con los consumidores y convertir a los navegadores en compradores.
Por ejemplo, con la analítica adecuada, se puede determinar si el consumidor se compromete más con los videos de mayor o menor tiempo, o saber cuál es el “número mágico” respecto de su duración. También se puede utilizar la analítica para identificar la cantidad de veces que un video fue visto, en comparación con las tasas de conversión, para ver si hay una correlación. Por último, si la analítica muestra que los videos no son vistos, también se pueden realizar acciones, sea sacar del sitio o determinar que lo mejor es modificar el video para reemplazar los que no están teniendo un rendimiento adecuado.
Más allá de la analítica tecnológica real, es útil pedirles a los clientes que realicen comentarios sobre los mismos para determinar si se debe modificar el contenido, hacer videos adicionales, etc. todo con el fin de responder a las preguntas y preocupaciones comunes.
Desarrollar una estrategia de video que refuerce la experiencia de compra de los consumidores, se traduce en el compromiso del consumidor con un negocio frente al competidor. No se necesitan grandes montos para generar los resultados deseados. Todas las consideraciones anteriores, pueden ayudar a darle valor a los videos para que su campaña de video marketing sea exitosa y atraiga clientes tanto online como offline.
